el cerro del 19 - Carabayllo
Uno de los conocimientos más importantes de tantos de los que he recibido en estos dos últimos años, es el de ser TÍA, y desde que convivo con Luziane puedo afirmar que sé lo que es ser tía-maestra, mamá y sobre todo líder de influencia. Desde hace 2 años mi hermana Rocio se quedó a vivir en mi casa, a causa del nacimiento de su primogénita a quien llamó Rihanna Luziane. La estimulación temprana en la adquisición de nuevas habilidades, actitudes y comportamientos, ha sido fundamental para que el desarrollo de Luziane sea más eficaz y rápido. Sin embargo, veo qué terrible daño y atraso ocasionan los padres, cuando en vez de ayudar entorpecen el proceso de desarrollo del niño. He observado que Luziane, siendo hija única de madre soltera, es una niña que ha llegado a un estado de atraso en su conducta y en su salud física. A continuación daré a conocer algunas conclusiones personales acerca de la composición del ser humano y posteriormente describiré cómo ha sido el desarrollo de Luziane paso a paso, basado en este análisis:
Todo ser humano está compuesto por tres dimensiones: física o biológica, emocional o psicológica y espiritual. Siendo los niños, seres puramente sensitivos, todo estímulo que ellos en sus primeros años reciben, lo adquieren básicamente desde su dimensión espiritual; por esto es fundamental generar un ambiente de mucho afecto y confianza en ellos. Si bien es cierto, los padres son los primeros llamados a amar a sus hijos, no podemos obviar un punto central: la fuente principal del primer y perfecto amor es Dios, y si se pretende amar a un hijo pasando por alto este conocimiento, toda educación espiritual será vana. Sentar las bases para el desarrollo de un niño seguro de sí mismo, no sólo se centra en promover sus talentos artísticos o intelectuales, e incluso sociales; el éxito de todo niño y sobre todo de toda persona humana, siempre se basará en su convicción y acción de su potencial de acuerdo al propósito del amor de Dios.
Cuando los padres traen hijos al mundo, adoptan muchas posturas para enfrentar la crianza/educación del recién nacido. He observado tantas formas de crianza, la mayoría muy agresivas y algunas pocas muy sabias y afectivas. Es verdad que nadie estudia para ser papá o mamá, sino que - lamentablemente - como decía la chilindrina "echando a perder se aprende" .
Según mi punto de vista, a la crianza de los chicos la voy a denominar crianza/educación por no decir sólo lo último, puesto que el criar más que "estar al lado de" es "guiar, educar, iluminar, proveer, transmitir, y todo lo que implica enseñar con afecto". En este proceso de crianza/educación, uno de los aspectos que más me sorprende y conmueve a la vez es el hecho de encontrar niños que son obligados a vivir infelices por las necesidades económicas de los padres. Al parecer la familia en sectores económicos y sociales pobres (en materia y/o espíritu) sustenta el progreso y la felicidad en la cantidad de dinero que suministran; cuando en el fondo, sabemos que el dinero ni el mejor trabajo va a traer la unidad, la paz y el amor en un hogar.
Observo que nuestra sociedad peruana está muy mentalizada en creer que para ser feliz hay que tener dinero y éxito lo más rápido posible. Yo soy una amante del progreso y del éxito; sin embargo estas metas son el resultado de un proceso no sólo material, sino primeramente psicológico y sobre todo material.
Nuestra niñez crece con tantas carencias de querer algo, de recibir, de anhelar, de soñar, y de ver frustrados sus sueños de infancia. Recuerdo claramente mi infancia: tenía unos padres que podían dármelo todo, pero sólo lo hacían cuando yo les rogaba mucho, y esto únicamente, cuando algún deseo mío coincidía con algún deseo de ellos, ejemplo: ropa y zapatos. Sin embargo, a la hora de soñar acerca de un juguete, o de hacer algo como cantar, bailar o actuar, obtenía casi siempre una expresión de rechazo y de burla, lo cual traía en mí una profunda frustración. Paradójicamente mis padres siempre creyeron que fueron los mejores, siempre juzgaron mi comportamiento rebelde, tachándome hasta de endemoniada y drogada.
Ahora que tengo 28 años, y puedo ver la crianza/educación de tantos niños, entre ellos el de mi sobrina de apenas 2 años; me doy cuenta del daño irreparable que los padres causan a los hijos cuando se centran básicamente en lo material, en cubrir sus expectativas personales de que el hijo esté bien vestido, bien peinado, bien bañado y bien alimentado; claro que esto es super importante, no estoy en contra de ello, pero sí en contra del desequilibrio en la crianza.
Es imposible que un hijo que encuentra su satisfacción personal únicamente en lo superficial, aprenda a reconocer la felicidad o el amor de los valores espirituales que la vida trae a todas las personas.
junio 2011
Las relaciones simbólicas que las imágenes mantienen con un pueblo muchas veces son fruto de la razón cultural de una estigmatización religiosa. Los monumentos naturales como los cerros, a lo largo de la historia peruana han tenido, y tienen aún, una significación integradora sobre lo humano y su medio ambiente.
En mi experiencia, corta, con los niños y niñas, pude conocer que toda esta suposición tenía cierta validez. Observé que se afirmaba un conocimiento personal, a partir de la posición de la identidad en el entorno geográfico y social.
Los niños y niñas que viven en el cerro lo experimentan la afirmación de su identidad, pero no se han dado las condiciones para que lo reconozcan y lo expresen con libertad artística, más aún cuando el subir al cerro puede estimular sus múltiples inteligencias y sus creatividades.
Subiendo al cerro, en el cansancio, calor, sed, miedo y otras necesidades los niños descubren que adoran atravezar situaciones críticas, de riesgo y aventura, pues ésto reafirma su valentía y la osadía que pueden tener para subir el cerro, caminar, jugar, socializar, pelear, en sí, conducirse por la vida.
Subiendo el cerro, noté que los niños y niñas deseaban sentirse seguros y a la vez inseguros, porque frente a cada dificultad del camino, algunos se engreían y otros querían que los engrieran. La experiencia me ayudó a trabajar un poco de la confianza, autonomía e iniciativa, que Erikson plantea, para el desarrollo físico y social del niño.
Sentir miedo, ejercitar su resistencia, probar su equilibrio, demostrar su fuerza y velocidad, observar su barrio desde lo alto, ayudar al otro, tener sed y cansancio, reflexionar y expresar sobre la existencia del cerro y de los propios hombres, crear poemas, contar chistes, mimetizarse con el cerro, depender de una roca para avanzar, depender de una mano para levantarse, significa aprender a vivir.
A simple vista la pintura es llamativa y en el fondo es también una fuente histórica importante para conocer cuáles eran los juegos que practicaban nuestros ancestros europeos; este cuadro me motiva estimular a niñ@s, jóvenes y adultos dibujar nuestros juegos, aquellos que puedan tener influencia de todo tipo, pero que por todas las cosas sean juegos realizados por peruan@s y en nuestro propio contexto social.
De pronto me viene la aberrante y triste idea, de que en un cuadro de juegos de nuestros tiempos, se dibujen juegos estáticos, pasivos, violentos o puramente cibernéticos. No estoy en oposición al avance de la tecnología en los juegos, pero me opongo y me resisto que los juegos de nuestros tiempo tengan que ser más intelectuales que físicos y sociales. El desequilibrio en el desarrollo biopsicosocial de una persona, sólo le proporciona deficiencias, enfermedades, stress, depresiones, soledad, etc.
Por eso, que viva el Juego con nuestros padres-madres, herman@s, vecin@s, compañer@s de trabajo, con nosotr@s mism@s
Sin embargo, como parte de una investigación sobre las actividades dramáticas y su importancia en el desarrollo de la autoestima, decidí pasar por alto algunos conservadurismos propugnados en la institución, y llevar al límite la capacidad creativa y lúdica de los niños.
In my few years of pedagogical experience, never it had the oprtunity to experiment with hte theater oh shades and it always asked to me how the children of a traditional school would react before a new experience. It was scared of which the teachers negatively reacted by my audacity to take to the classroom an activity that could cause the overflowing energy that as much fights to appease. Nevertheless as it leaves from my investigation on the influence of the dramatic activities in the development of the self-esteem, I decided to ignore some conservadurismos that frustrate the creativity of the children.At first the presence of a new object and the different atmosphere, caused fear in the children. They entered a space totally transformed. The ample, full hall light and game, was now a totally dark place by the papers and fabrics that transformed the classroom into a species of cavern, with the only presence of a center. Some children were frightened, so was the case of Christian and Ruben, but measured that listened to the indications on the use of the center and the dark space, they were including/understanding what would be all this. Other children did not show much surprise, since they remembered the games with his shades, that do in house. The first activity consisted of which they would observe and would listen to a story with the shades. All were very engrossed with the small silhouettes that projected immense shades. In the second part, some played freely with the shades, and silhouettes that they themselves constructed; others prefierieron to play with their own silhouettes, and the same found greater motivation in other games with elements, different from the proposed ones in the class. Finally, always the objective was fulfilled to motivate and to wake up the creativity of each boy, or with the proposed games or the elements that they found around to them.Probably the reader thinks that the percentage of children whom no of the proposed games made, has not managed to develop some level of greater creativity of those than yes they did, nevertheless, thought more missed, it does not find sustenance when in the classes sigueintes, I observed that each boy developed with skill in the activities and games that motivated their interest and therefore it woke up its physical capacities, psychological and social.To traverse of the theater of shades, opened a door for the free experimentation with materials, atmospheres, colors and emotions; each young one was free to express its individuality, and was from activities like which the children mainly found in the sessions of theater, moments of freedom, organized chaos and of respect and much affectivity among them and the one who play, me.